Me encanta comenzar mis escritos, describiendo como comenzó la inspiración. Sentada frente al pc sin nada muy importante que hacer (como es usual), me percate de mi olor; sí, una mezcla extraña, esa emanación olfativa que produce mi cuerpo me describe tal y cual soy, no estoy disfrazada, no tengo perfumes ni desodorantes, solo sudor. Sudor hambriento, sudor cansado, sudor con sueño, sudor estresado. Solo sudor, un sudor con un olor fascinante, un olor que me desconcierta a mi... Que soy su dueña. Ultimamente he creido que nuestras mejores virtudes (valga la rebuznancia) siempre seran una maldición. ¿Por qué? La tecnología, La Revolución Industrial, ¿Que nos trajo? CALENTAMIENTO GLOBAL, los celulares, el internet, las camaritas de los telefonos, ¿Que nos trajeron? FALTA DE PRIVACIDAD, casi nula de hecho. Entonces en ese pequeño análisis (que ha sido bien extenso he pensado en eso por dias, pero seria imposible escribir todos mis pensamientos aqui, si lo haria, despues tendria que matarlos XD)extrapolando datos como siempre, Los perfumes, los desodorantes, ¿Qué nos trajeron?, buen olor, atraccion femenina (axe), una nueva tecnica de seduccion...? Pues no, a mi parecer nos trajeron distancia nos pusieron una barrera para comunicarnos con nuestro cuerpo, nos quitaron la facilidad de poder oler al macho de la especie y verificar mediante esto que es nuestro tipo, que de verdad siente deseos, o amor. Perdimos el contacto con las ganas, cuando hacemos el amor ya no nos huele a sexo, sino mas bien a Hugo Boss... Ganamos algo, pero perdimos mucho, y eso es lo que a gritos mi olor me pidio que expusiera, que compartiera, que demos rienda suelta a nuestros fluidos corporales que nos comuniquemos con nuestro cuerpo y que sepamos apreciarlo sin disfraces ni cortinas que dejemos circular esa emanacion olfativa al menos una vez al dia para que aprendamos a apreciar el valor de nuestro perfume personal, uno que sin duda nadie puede igualar.
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